…en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias, 4 y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación.5 Estos ignoran voluntariamente, que en el tiempo antiguo fueron hechos por la palabra de Dios los cielos, y también la tierra, que proviene del agua y por el agua subsiste, 6 por lo cual el mundo de entonces pereció anegado en agua; 7 pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos” (2 Pedro 2: 3-7)

Uno de los temas más recurrentes en la actualidad, y que afloran en todos los medios de comunicación es acerca del fin de los tiempos, o como más lo nombran, “el fin del mundo”.

Más de un millón de páginas de Internet hablan de la llamada profecía maya que dicen situar justamente el 21 de diciembre de 2012 como el día del “fin del mundo”.

Cada vez se realizan más películas sobre la cuestión del fin del mundo, como la ya famosa “2012” dirigida por Roland Emmerich, basada en esas supuestas profecías mayas.

¿Cuándo “el río suena, agua lleva” también esta vez? Podría ser…

1. El fin llega, pero el fin es según ha de ser entendido

Primeramente, deberíamos preguntarnos qué es bíblicamente “el fin del mundo”. Como ya he escrito en otros ensayos, en todo caso y como cristianos, cuando hablamos del “fin del mundo”, no hablamos de la destrucción del planeta, o de la aniquilación de toda la humanidad o algo por el estilo, sino más bien hablamos del cumplimiento del tiempo de los gentiles (Lc. 21: 24). Del mismo modo, podemos entenderlo como el fin de esta dispensación actual de la gracia, o incluso también como el fin de la dispensación del Reino sobre la tierra, comúnmente llamado Milenio (Ap. 20) una vez este llegue a su término (Ap. 20: 7)

Por otra parte, no existe un precedente bíblico que nos muestre que el fin del mundo tenga una fecha concreta, sino más bien todo lo contrario. Cuando el Señor Jesús enseñaba acerca de Su venida a por los suyos (que no es el fin), dijo acerca de ese día que era desconocido por todos, y sólo escogido por el Padre (Mt. 24: 36). El Padre tiene a Su disposición el escoger el día y la hora para enviar a Su Hijo a por Su amada, la Iglesia expectante y preparada.

Pero el asunto del “síndrome año 2012”, no ha dejado indiferente a muchos, como ya apuntamos.

“La alusión al fin del mundo tal y como muchos lo entienden, es muy común en nuestra cotidianidad”

Buscando el esconderse
Muchos se están tomando muy en serio las teorías cataclísmicas que conducirían este mundo a su destrucción, y están tomando medidas al uso. La siguiente noticia venía en un rotativo español de gran tirada:

“Las teorías sobre el Apocalipsis no paran de sucederse…El próximo reto a superar será el 21 de diciembre de 2012, según predijeron los mayas. Diversos grupos han empezado a poner en práctica esta teoría para protegerse del hipotético y cercano fin del mundo. G.S.E 2012 (Grupo de Supervivencia de España 2012) es uno de ellos, pionero en el Estado. Están construyendo un refugio atómico colectivo en algún lugar de la sierra madrileña que no quieren desvelar. Pero no son los únicos, tanto a nivel colectivo como individual” (1)

Cierta razón o lógica no les falta, ya que en estos últimos años, y sobre todo, meses, estamos siendo testigos de alteraciones notables en la naturaleza, como nunca antes se habían conocido. La intensidad en número y grado de los terremotos es una evidencia de lo que digo. Los cambios climáticos locales e imprevisibles lo es también.

Olas de frío, y olas de calor como la reciente de la India, con temperaturas cercanas a los 44º C que han dejado al menos 80 muertos, y todavía se prevé siga aumentando la temperatura por algunos días. (2)

“A causa de la terrible ola de calor, y como parte de un ritual para inducir la lluvia, estos niños rezan a sus deidades en el lodo, en Nari Bari, cerca de Allahabad, India”

Sea causado de forma natural o por la mano del hombre, el riesgo de destrucción de este planeta y de sus seres vivos es una constante, aunque para nosotros los cristianos, todo está muy claro. Jesús dijo:

“¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. 30 Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos” (Mateo 10: 29-31)

2. Las tormentas solares y cómo afectan o afectarían la tierra

“Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día emite palabra a otro día, y una noche a otra noche declara sabiduría. No hay lenguaje, ni palabras, ni es oída su voz. Por toda la tierra salió su voz,
y hasta el extremo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol…” (Salmo 19: 1-4)

Las tormentas solares son las erupciones de energía y materia que escapan del sol y se dirigen también hacia la Tierra.

Una tormenta débil podría dañar los satélites en órbita, interrumpiendo las comunicaciones, el suministro de energía eléctrica, GPS (sistema de posicionamiento global), etc. Una ráfaga sola fuerte de viento solar puede amenazar la seguridad nacional, los medios de transporte, servicios financieros y cualquier otra función esencial en esta sociedad tan dependiente de lo tecnológico.

“El sol y sus planetas”

Las tormentas solares no son nada nuevo, muchas de ellas golpean la tierra cada año. Cuando esas tormentas solares golpean la tierra, apenas afectan a los seres vivos, pero la amplia red mundial que sostiene nuestras vidas actúa como conductor y canaliza la energía destructiva de la tormenta desestabilizando toda la red eléctrica (3)

La siguiente noticia de índole científico, bajo el título “Los Científicos Predicen un Gran Ciclo Solar”, viene fechada en Diciembre, 21, del 2006:

“La evidencia aumenta: el próximo ciclo solar va a ser grande. El Ciclo Solar 24, que se producirá en 2010 o 2011, "parece ser uno de los ciclos más intensos que se hayan registrado, desde que estos se comenzaron a documentar hace casi 400 años", dice el físico solar David Hathway, del Centro Marshall de Vuelos Espaciales (Marshall Space Flight Center) de la NASA”. (4)

Efectivamente, esto se vio concretamente en este año 2010. Bajo el título “Una gran tormenta solar afectó el 10 de enero a la Tierra” leemos un extracto de esa noticia:

“La erupción solar registrada el pasado 6 de enero, que tres días y 20 horas después provocó en el entorno de la Tierra una gigantesca tormenta magnética, fue presenciada por toda la flotilla de satélites del Programa Internacional de Física Solar Terrestre (ISTP). Es la primera vez que estos observatorios especializados en estudiar y vigilar el Sol toman datos al unísono de un fenómeno de este tipo.

La erupción generó una enorme nube magnetizada de partículas solares, un anillo en expansión que alcanzó a nuestro planeta el 10 de enero. El día 11 dejó de funcionar de repente el satélite de televisión Telstar-401, muy probablemente víctima de la intensa radiación generada por la erupción solar” (5)

“Cada 11 años, el Sol entra en un turbulento ciclo de actividad máxima solar que origina tormentas que desprenden ondas de radiación y viento solar. El próximo periodo de actividad máxima solar ocurrirá en el año 2011”

Asimismo, leemos la siguiente noticia fechada recientemente: El observatorio espacial ruso Tesis registró el pasado lunes 22 de enero un máximo histórico de llamaradas solares, la cifra más alta de los últimos cinco años, según ha informado el Instituto de Física ruso Lebedev. Este número es equiparable al total de explosiones solares que se observaron en 2009. (6)

Pero la cosa no acaba aquí – Un reciente informe de la NASA y la ESA realizado a través de la Academia Nacional de Ciencias de USA, afirma algunas apocalípticas predicciones para el 2012. El informe dice que se espera para ese año una tormenta solar que podría acabar con todos los sistemas vivos en la Tierra, según publica Urgente 24 (7)

Las consecuencias de una tormenta solar mayor de lo habitual, serían – como poco – preocupantes para el modo de vida actual. Las alarmantes consecuencias del escenario pintado por la NASA en 2012 ponen en peligro, de hecho, la vida cotidiana de todos y, la seguridad nacional de cualquier país, incluso con un mínimo sistema de telecomunicaciones. (8)

Cuando caigan los sistemas, y estos arrastren a los sistemas secundarios, las consecuencias serán graves- El impacto de la tormenta podrían caer sobre las estructuras interconectadas, con efectos devastadores: la distribución del agua potable se hará del todo imposible en pocas horas, se perderán los alimentos que se encuentren en cámaras en el espacio comprendido entre 12 y 24 horas, los medios de transporte también se verán afectados. (9)

Se trata de nuestra actual forma de vida, dependiente en todo y para todo de una tecnología cada vez más sofisticada. Una tecnología que, irónicamente, resulta muy vulnerable a un peligro extraordinario: los enormes chorros de plasma procedentes del Sol. Un plasma capaz de freír en segundos toda nuestra red eléctrica (de la que la tecnología depende), con consecuencias realmente catastróficas. (10)

“El 13 de marzo de 1989, la ciudad de Québec, en Canadá, fue azotada por una fuerte tormenta solar. Como resultado de ello, seis millones de personas se vieron afectadas por un gran apagón que duró 90 segundos. La red eléctrica de Montreal estuvo paralizada durante más de nueve horas. Los daños que provocó el apagón, junto con las pérdidas originadas por la falta de energía, alcanzaron los cientos de millones de dólares”

José Manuel Nieves, en su artículo publicado en el diario ABC, “La tormenta solar del fin del mundo”, el cual condenso, dice lo siguiente:

El escenario podría ser cualquier gran ciudad de Estados Unidos, China o Europa. La hora, por ejemplo, poco después del anochecer de cualquier día entre mayo y septiembre de 2012. El cielo, de repente, aparece adornado con un gran manto de luces brillantes que oscilan como banderas al viento…Pasados unos segundos, las bombillas empiezan a parpadear, como si estuvieran a punto de fallar. Después, por un breve instante, brillan con una intensidad inusitada... y se apagan para siempre.

En menos de un minuto y medio, toda la ciudad, todo el país, todo el continente, está completamente a oscuras y sin energía eléctrica. Un año después, la situación no ha cambiado. Sigue sin haber suministro y los muertos en las grandes ciudades se cuentan por millones.

En todo el planeta está sucediendo lo mismo. ¿El causante del desastre? Una única y gran tormenta espacial, generada a más de 150 millones de kilómetros de distancia, en la superficie del Sol…lo descrito arriba es exactamente lo que pasaría si el actual ciclo solar (que acaba de empezar después de más de un año de completa inactividad) fuera sólo la mitad de violento de lo que se espera. Así lo dice, sin tapujos, un informe extraordinario financiado por la NASA y publicado hace menos de un año por la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos (NAS). (énfasis del autor) (11)

Vemos que son los mismos científicos esta vez – y no los visionarios - los que predicen lo que acabamos de leer.

“Erupción solar”

Existe un precedente importante en cuanto a la caída de los sistemas de comunicación, yéndonos atrás hasta el año 1859, con la llamada “Tormenta Carrington”. En ese año se produjo una gran fulguración solar. La tormenta solar de 1859 fue la más potente tormenta solar registrada en la historia. Causó la caída de los sistemas de telégrafo en toda Europa y América del Norte. Los cables de telégrafos sufrieron cortes y cortocircuitos que provocaron numerosos incendios, tanto en Europa como en Norteamérica.

Fíjense. Si esa gran fulguración solar afectó a simples y primitivas líneas telegráficas, imagínese que es lo que no hará otra parecida a los enormes, sofisticados y vulnerables a causa de su extrema complejidad - sistemas de comunicación actuales - y cuales no serán sus consecuencias directas respecto a nuestro modo de vida actual.

“Véase la diferencia de tamaño entre lo que sería la tierra y una sola lengua de fuego del sol”

Sigue escribiendo José Manuel Nieves, en el ABC: “…no se trata de ciencia ficción, se sabe que antes o después el sol desatará una tormenta terrible y no hay manera de evitarlo, y el próximo ciclo solar de actividad extrema se espera para el año 2011” (12)

Parce que así están las cosas...

En todo caso, aquí no cabe decir que la mano del hombre en su incursión en el medio ambiente es el problema, lo que se llama influencia antropogénica. El sol no es nuestro “medio ambiente”, y sin embargo dependemos totalmente de él. No le afectamos a él; él nos afecta en un modo u otro a nosotros.

La realidad, es que es Dios quien está en control de todo, incluido el mismo sol, y es Dios hablándole a este mundo y advirtiéndole muy seriamente.

“Porque las cosas invisibles de Él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa” (Romanos 1: 20)

3. ¿Por qué como cristianos nos asombramos?

“El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. 34 Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día. 35 Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra. 36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre” (Lucas 21: 33-36)

Que el ser humano busque una salida ante la amenaza, es natural y está dentro de todo pronóstico. La cuestión aquí no es el buscar una solución, sino qué solución buscar.

Los verdaderos creyentes lo debemos tener claro, y por tanto, no asombrarnos por lo que está empezando a ocurrir. Dios está enojado con este mundo impío y detractor, y las cosas que han de venir, es decir, Sus juicios, serán una realidad ineludible.

Que este mundo tal y como lo conocemos va hacia su destrucción, es algo que todos los cristianos deberíamos saber y entender por la Palabra. El mismo Señor Jesús lo advirtió fehacientemente cuando dijo que habrían “señales en el sol” y que “las potencias de los cielos serán conmovidas” (Lc. 21: 25, 26)

Leemos en 2 Pedro 3: 7;

“…los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos”

Insisto; ¿De qué nos asombramos, pues?

La Palabra no puede ser más específica:

“Porque así dice Jehová de los ejércitos: De aquí a poco yo haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra seca; y haré temblar a todas las naciones, y vendrá el Deseado de todas las naciones…” (Hageo 2: 6, 7)

Dios está haciendo temblar la tierra y empezando a hacer temblar las naciones.

Hace unos días que se produjo la erupción de un volcán en Islandia, el Eyjafjallajokull, y sus cenizas llegaron a cubrir gran parte de Europa hasta el punto de hacer frenar el tráfico aéreo. Con esta actuación de la naturaleza, vemos que Dios está diciendo a esta humanidad sabia en su propia opinión que sólo Él está en control, y no el hombre. Este debería cuestionarse muchas cosas, empezando por abandonar su neo laicismo, que no es más que ateísmo práctico, y considerar que, efectivamente, sí hay Dios que lo rige todo y al cual deberá rendir cuentas un día, todos y cada uno.

¡Todas las seguridades del ser humano se desmoronan cuando Dios mueve una pestaña!

“La erupción del volcán islandés Eyjafjallajokull”

A. El engaño actual camino a la Gran Tribulación

La terrible incertidumbre e inicio del caos que ya se puede ver, con todas esas sacudidas en la naturaleza, en la economía, en el gobierno de las naciones, en la seguridad cotidiana, y en general en todo lo que los ojos pueden contemplar, no es más que consecuencia directa de lo que existe en lo espiritual; es decir, en el corazón del hombre y su manifestación (Mr. 7: 20-23).

El hombre moderno, en su apóstata post cristianismo y consecuente negación de Dios y de Sus principios, ha ido por años acumulando ira para ese día, y todo ello se está previendo en lo visible.

“Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios” (Romanos 2: 5)

El apartarse de Dios tiene, y va a tener, sus terribles consecuencias.

En este mismo contexto, y adentrándose en la sutilidad de su propio engaño, contrariamente, hay muchos que están convencidos de que a partir de la fecha del 21 de Diciembre del 2012, no se producirá quizás ninguna devastación o cataclismo, sino más bien todo lo contrario. Dicen que se producirá un cambio drástico en la humanidad, la cual experimentará una notable transformación hacia “mejor”.

Según algunas creencias de la Nueva Era (New Age) el año 2012 estaría destinado a ser un gran año de transformación. Existe desacuerdo entre los creyentes sobre si en el año 2012 tendrá lugar el fin de la civilización, o si en cambio la humanidad se elevará a un nivel superior (13)

Efectivamente, algunos de estos creen que un número considerable de gente morirá, por no estar preparada para dar el salto cuántico espiritual, y otra será la que repoblará el planeta, con una más elevada estatura metafísica.

Este será el gran engaño del enemigo.

Sobre las profecías de los Mayas
Hablando de engaño, está muy extendida la interpretación esotérica de las llamadas siete profecías de los Mayas, defendida incluso por eruditos y científicos.

Miguel Rivera Dorado, arqueólogo y doctor en Antropología Americana, cuya especialidad es la antigua civilización maya, y es profesor de esa materia en la Universidad Complutense de Madrid, responde ante la pregunta, de si es cierto que los mayas profetizaron el fin del mundo para 2012, exclamando: “La famosa profecía maya de 2012 es absolutamente real” (14)

Dice el Dr. Rivera, que según los mayas, la humanidad estaría viviendo en el llamado por ellos “Cuarto Mundo” o cuarta etapa de la humanidad, el cual habría empezado justamente el 13 de agosto del año 3113 a. C. y terminaría el 21 de diciembre del 2012, y apostilla: “No se trataría, entonces, del fin del mundo propiamente dicho, sino del fin de un ciclo, lo que conllevará cataclismos y muerte” (15)

“El Dr. Miguel Rivera Dorado”

En cuanto a, qué consistirá el final del citado ciclo, responde el Dr. Rivera Dorado:

“No se sabe gran cosa, excepto que será un fin traumático, como todos los anteriores” – y sigue diciendo – “En este momento estamos en lo que los mayas llamaban la “humanidad del maíz”, que vendría a ser algo así como la culminación del ciclo evolutivo del ser humano. Por tanto, quizá en el nuevo ciclo los humanos nos acercaremos aun estado de divinidad o nos convertiremos en dioses” (énfasis nuestro) (16)

“Los gemelos divinos y el dios del maíz en una cerámica pintada”

Cuando la Biblia nos habla del castigo a los impíos que pueblan este mundo, comparando el asunto el Señor Jesús con la humanidad de los tiempos de Noé o los de Lot, (Lc. 17: 26-29) estos ven todo lo contrario – que ¡los humanos se convertirán en dioses!

Ese es justamente el engaño del propio diablo, la serpiente antigua: “Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; 5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal” (Génesis 3: 4, 5)

Lo que realmente ocurrirá
Contrariamente a la interpretación esotérica, y a la luz de la Escritura, esta nos revela que en un momento dado, se levantará una bestia, llamada el Falso Profeta que presidirá y administrará ese engaño religioso/espiritualista a nivel global. Será la religión del Nuevo Orden Mundial y sólo prevalecerá hasta la venida gloriosa de Cristo (Ap. 13: 11ss; Ap. 9: 20ss).

Esto nos recuerda también lo que la Escritura dice: “que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán” (1 Ts. 5: 3)

El engaño en el que están los de la Nueva Era (y lamentablemente, muchos que se dicen creyentes también), es el de creer que el hombre es bueno en sí mismo, y que por sí mismo puede llegar a cambiar, si recibe la guía conveniente.

Sin embargo, la Biblia dice una cosa bien distinta: “…el intento del corazón del hombre es malo desde su

juventud…” (Gn. 8: 21)

“Según la interpretación de las profecías de los Mayas, en el solsticio del 21 de diciembre del 2012, cuando el Sol asome en el amanecer, será el momento en que el llamado “Núcleo Central Galáctico” comience a dar a la tierra con sus rayos directamente desde la “fuente galáctica de energía.”

No existe en el hombre un camino a un “nivel superior”; ni en sí mismo, ni en las conjunciones planetarias, ni en ningún “rayo galáctico”, ni en la llamada era de Acuario, ni en los supuestos seres intergalácticos, ni en ninguna falsa enseñanza de los nueva-eristas de turno, los cuales – entre otras cosas - se aferran a las supuestas profecías mayas, afirmando que la llegada del décimo tercer bak'tun del calendario maya (el 21 de diciembre de 2012) implicará la llegada de una Nueva Era.

La única “Nueva Era” que los cristianos esperamos, es la que nos alcanzará, cuando el Señor venga a por nosotros (1 Ts. 4: 13-18), y la consiguiente manifestación del Reino sobre esta tierra reinando Él desde Jerusalén, y por mil años (Ap. 20).

Escondiéndose de la evidencia
Pero, volviendo por un momento al inicio del ensayo, muchos buscan, y buscarán el ocultarse en escondrijos y búnkeres, y la Palabra ya anticipa que esto mismo ocurrirá:

“Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes; 16 y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero; 17 porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?” (Ap. 6: 15, 16)

Se esconderán de lo evidente. Como podemos ver, la razón por la cual se esconderán, será más bien al descubrir que Dios es real, que rige lo creado, y que el Hijo no es aquel hombrecito que se les antojaba débil, suave, tierno, religioso, con barbita y sandalias, sino que es ¡el León de la tribu de Judá!, y que ese día, el de Su juicio, habrá llegado.

“Porque el Padre a nadie juzga, sino que todo el juicio dio al Hijo” (Juan 5: 22)

“Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino, pues se inflama de pronto su ira. Bienaventurados todos los que en Él confían.” (Salmo 2: 12)

4. Conclusión

El año 2012 no será el año de “la odisea de la tierra”. De hecho ningún año lo será, puesto que el hombre en sí mismo no tiene ni rumbo, ni habilidad, ni fuerza, ni nada de lo necesario para salvar o salvarse; ni siquiera para perecer, pues es Dios quien quita la vida, así como la da.

El hombre fue CREADO para depender de su Creador, y Dios va a castigar la falsa auto suficiencia y enorme soberbia del incrédulo.

No sabemos qué ocurrirá, o qué no ocurrirá a finales del 2012, pero lo que sí sabemos es que no será el “fin del mundo” tal y como muchos lo pronostican. Todavía deberán suceder muchos eventos contenidos en la futura Tribulación, que han de acontecer en este mundo una vez se levante la Bestia Anticristo (ver Apocalipsis 6ss).

El fin de este mundo como lo conocemos, es decir, el fin del dominio gentil, cuando el mundo deje de estar bajo el maligno (1 Jn: 5: 19b) tendrá su fin asegurado cuando el Rey de reyes aparezca en gloria (Ap. 19: 11).

Mientras tanto, la Iglesia que ama al Señor y Su venida, espera el día glorioso en el cual los muertos en Cristo resuciten y los que quedemos seamos transformados, y todos arrebatados vayamos a recibir al Señor en las nubes, para estar siempre con Él (1 Ts. 4: 13-18).

¿Será el 2012 el año del Arrebatamiento? Podría ser, pero no nos atreveremos a poner fecha aquí. El día y la hora nadie lo sabe, sólo el Padre, nuestro Padre Celestial.

Una cosa sabemos, porque la Palabra así lo asegura: “Él viene en breve” (Ap. 22: 20)

¡Maranatha!

Dios les bendiga.